Es difícil saber a quién beneficia la huelga, si sirvió para algo o establecer quién ganó el pulso, como en las elecciones salvo victoria
aplastante por uno de los bandos, da la sensación de que todos ganan.

Sin entrar en los motivos de unos y otros  seguramente muy respetables todos, desde un abordaje intelectual,  yendo a la raíz del tema,  ante un problema  uno pude tratar de resolverlo o paliar los efectos negativos que genera. Desde una visión seguramente simplista y  básica, si lo que uno quiere es disminuir el desempleo, facilitar el despido, a priori, no parece un método muy adecuado para conseguir resultados, ni a corto  y,
si no le acompañan otro tipo de medidas estructurales del mercado o contexto empresarial, ni a medio o largo plazo.

Facilitar el despido, más  la auto regulación salarial, los descuelgues de convenios y otro tipo de medidas, a  lo que sí puede ayudar es a incrementar la flexibilidad empresarial y  por tanto sus posibilidades de adaptación y supervivencia en un entorno de recesión, pero a costa de incrementar los despidos lo que lleva a reducir el consumo y a nuevas situaciones de ajuste lo que lleva a nuevas reducciones del consumo lo que lleva a donde todos sabemos.

Los que operamos en la gestión, sabemos que la dinámica empresarial normalmente permite ajustar gasto en la partida más alta de la explotación, que suele ser personal,  pero también sabemos que los ajustes tienen un límite, rebasado el cual, aún evitando dañar lo que conforma nuestro core como servicio o producto, pasamos de ser más eficientes a ser menos operativos, a fallar en calidad y por tanto a perder clientes, lo que lleva a plantear nuevos ajustes que dañan más la reputación corporativa y finalmente suelen finalizar con la entidad.

Empresas y organizaciones van de la mano de los consumidores, que al final son los trabajadores que las forman. Adoptar medidas sólo en  uno de los componentes de la ecuación, especialmente si es a costa del otro, no va a permitir un escenario sostenible.

Sólo  acompañando estas regulaciones de otra serie de medidas en todo el contexto: Trabajadores (limitando el impacto de los despidos, facilitando salidas, reacondicionando los perfiles profesionales, participación en programas de emprendimiento …..) Empresas (desarrollando acciones que faciliten su agilidad ante la crisis, reestricción temporal de la deuda, obtención de financiación asumible si existe un plan de viabilidad, participar en un plan de asesoramiento para recuperar las posibilidades de éxito..) Y finalmente del propio Mercado ( hacer más barata, flexible, que no precaria, la contratación, disponer de medidas coyunturales de adaptación a circunstancias adversas, facilitar la financiación para crecimiento o adaptación tecnológica, facilitar la creación de empresas y financiación de proyectos nuevos….) Sí pueden favorecer  la sostenibilidad de las organizaciones y del empleo.

Por nuestro trabajo hemos operado con las normativas laborales  a nivel internacional y la española no era de las más proteccionistas. Por otro lado, emprender en España, es un camino cuanto menos, repleto de obstáculos ajenos a la propia actividad empresarial o a la competitividad, lo que lleva a plantearse si no es mejor trabajar para otros.

¿Ayuda una huelga en este momento? En el contexto empresarial, las huelgas dañan a todos, sólo sirven para flexibilizar posturas para empezar a negociar otra vez, y alcanzar el punto de acuerdo. En el mismo sentido, las posturas sindicales deberían conducir a facilitar la supervivencia y adaptar modelos de negociación colectiva enfocados no a sectores generales sino a organizaciones concretas, de modo que cada uno tenga el entorno laboral más adecuado a su realidad, en los malos tiempos y en los buenos.

¿Estamos tomando medidas coyunturales para corregir un problema estructural?, ¿Que las Empresas y Organizaciones tengan mejores posibilidades de sobrevivir es un objetivo perverso? ¿Tan  perverso como para que se nos diga otra cosa?¿ Somos tan infantiles que necesitamos que alguien, que sabe mejor que nosotros lo que nos conviene, nos dé golosinas para que nos comamos la verdura?

 Creo que todos, empresarios y trabajadores,  entendemos la gravedad de la situación, estamos dispuestos a sacrificar algo de presente para tener mejores posibilidades de futuro y que no merecemos zanahorias, ni palos, sino herramientas, union y confianza.